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Estrés

¿Qué es el estrés?

El estrés es la respuesta física o emocional que utilizamos ante una presión concreta, es una respuesta natural del ser humano ante ciertas situaciones que implican una sobrecarga.

El estrés  emocional puede ser de dos clases:

  • Estrés positivo (también llamado “eutrés”) , como por ejemplo el que puede sentir un actor experimentado antes de salir a escena. Este tipo de estrés te mantiene alerta e incluso, en situaciones de peligro, puede salvarte la vida porque te da la fuerza suficiente para defenderte ante un ataque o accidente.
  • Estrés negativo (también llamado “distrés”), que es al que nos referimos usualmente cuando hablamos de estrés. La respuesta es exagerada y entonces, comienza a afectar a tu salud y a las relaciones con tu entorno.

Los síntomas que se pueden experimentar estrés son físicos, psicológicos o conductuales:

Síntomas físicos: Problemas en el aparato digestivo (colon irritable, acidez, gases), tensión y dolor de espalda o cabeza, trastornos coronarios o cansancio físico.

Síntomas psicológicos: Nerviosismo, dificultad para tomar decisiones, alteraciones en el estado de ánimo, fatiga emocional, irritabilidad, insomnio, sensación de embotamiento.

Síntomas conductuales: Problemas de alimentación, consumo más excesivo de alcohol o tabaco, tics nerviosos o bruxismo o rechinar de dientes entre otros.

Las causas del estrés pueden ser debidas a situaciones o factores externos como dificultades o cambios vitales o laborales, problemas financieros, problemas familiares… o propios de la persona como un elevado perfeccionismo, autocrítica, expectativas poco realistas…

¿Cómo te ayudamos? Nuestro Tratamiento.

Desde Actúa seguimos un método de trabajo específico para el tratamiento del estrés. Una vez realizada la evaluación detallada de los distintos factores implicados durante las primeras sesiones explicamos a la persona una devolución del problema para facilitar la comprensión del origen y mantenimiento de éste.

Una vez finalizada está evaluación elaboramos junto con la persona un plan de acción o tratamiento que tiene como principales objetivos:

  • Comprender el problema por parte del paciente.
  • manejar y reducir el estrés tanto a nivel emocional, físico y conductual mediante en técnicas para reducir la activación psicofisiológica como visualización o relajación, ejercicios de atención plena o mindfulness.
  • Dotar a la persona de herramientas de gestión del tiempo.
  • Identificar y sustituir las creencias y pensamientos automáticos negativos que dan lugar a emociones y comportamientos negativos con el fin de que pueda tomar conciencia de ellos (por ejemplo pensamientos de alta exigencia) y aprenda a modificarlos.

Para ello trabajamos principalmente desde una orientación cognitivo conductual integrando también las orientaciones sistémica y humanista trabajando con las técnicas que han demostrado mayor eficacia en el tratamiento del estrés.