¿A QUÉ HACE REFERENCIA ESTE TÉRMINO TAN ESCUCHADO EN NUESTRO DÍA A DÍA?
Como su propio nombre indica, la dependencia emocional se trata de una dependencia sentimental que se da en aquellas relaciones interpersonales donde los roles de cada miembro de la pareja no están en simetría.
La persona dependiente, exhibe una necesidad extrema de afecto hacia el otro miembro de la pareja, ya que percibe que sus necesidades básicas de afecto no están satisfechas. Para complacer esta necesidad, las personas que lo sufren ejecutan comportamientos desproporcionados, llegando a ser en ocasiones patológicos.
¿QUÉ CAUSAS PUEDEN ESTAR IMPLICADAS EN EL DESARROLLO DE LA DEPENCIA EMOCIONAL?
Podríamos dividirlas en cuatro apartados:
- BAJA AUTOESTIMA: causa principal y más común en personas dependientes. Este tipo de persona tiende a desvalorizarse de manera repetida, llegando a generar sentimientos de inferioridad y culpabilidad, que pueden ser dañinos para ellos mismo y, en consecuencia, para la relación de pareja. Con el paso del tiempo estos sentimientos pueden favorecer a que el otro miembro de la pareja ejerza un rol dominante sobre el más dependiente.
- MIEDO A LA SOLEDAD: las personas dependientes no conciben el hecho de estar solas, no saben, ni quieren que eso ocurra. Es por ello que necesitan compañía a cada momento sin importarles la calidad de esa relación. Son personas que suelen empalmar una relación sentimental con otra sin pasar tiempo sin pareja.
- APEGO INSEGURO EN LA INFANCIA: esto se da cuando figuras paternas o de referencia han mostrado actitudes de abandono en la infancia, generando vínculos poco saludables que se irán reproduciendo a lo largo de la vida y en diferentes situaciones. Hablando en términos de relaciones de pareja, este tipo de apego puede provocar inseguridad y excesivo miedo al abandono.
- MITOS SOBRE EL AMOR ROMÁNTICO: durante la adolescencia y la juventud se empiezan a experimentar las primeras relaciones interpersonales, y es aquí donde los tópicos sobre el amor cobran más fuerza formando relaciones disfuncionales donde se tiende a idealizar al otro miembro de la pareja o se establece la creencia del amor eterno.
SÍNTOMAS QUE PODEMOS EXPERIMENTAR:
- Miedo exagerado a la separación o al imaginar que la relación pueda terminar.
- Impulso irrefrenable por estar con la persona de la que se depende y necesidad de saber en todo momento dónde se encuentra y que está haciendo, llegando a rozar la obsesión por esa persona.
- Idealización de la pareja negando posibles defectos.
- La persona dependiente tienda a aplazar o anular sus planes para estar con la persona de la que depende.
POSIBLES CONSECUENCIAS:
La principal consecuencia de una relación dependiente es el terrible malestar que genera en ambos miembros de la pareja, aun así, podemos encontrar diferentes consecuencias a la hora de mantener relaciones de dependencia emocional.
- Sentimientos negativos. La persona dependiente es consciente de que su relación no es satisfactoria, sin embargo, se ve incapaz para cortar con la relación.
- Necesidad extrema por recibir cariño. La persona dependiente es capaz de negar y justificar comportamientos desagradables con el fin de recibir cariño.
- Preferencia por relaciones asimétricas. La persona dependiente acepta el rol de sumisión y obediencia, fomentando una relación desequilibrada.
- Ruptura con amigos y familiares. Es frecuente que, el círculo más cercano, advierta a la figura dependiente de la situación en la que está inmerso, generando enfrentamientos ya que existe negación de la situación por parte de la persona dependiente.
- Déficit de las habilidades sociales. Como consecuencia al anterior punto, al centrarse tanto en su pareja, va abandonando sus relaciones de amistad y como resultado, un deterioro de sus habilidades para establecer relaciones.
- Altruismo excesivo. En relación a los últimos puntos anteriores, la persona dependiente establece como prioridad tener el máximo tiempo posible para tenerlo con su pareja, abandonando así sus labores sociales, actividades de ocio e incluso sus responsabilidades laborales, todo ello con el fin de satisfacer a su cónyuge.
¿QUÉ SOLUCIONES PODEMOS LLEVAR A CABO PARA SUPERAR LA DEPENDENCIA EMOCIONAL?
En primer lugar, es importante reconocer todos estos síntomas y consecuencias que hemos nombrado con anterioridad, ser honestos con nosotros mismos y, aceptar que es posible que tengamos un problema.
Es importante trabajar en ti mismo y reforzar tu autoestima, así como establecer patrones de una buena comunicación asertiva. Echa un vistazo a este post: 10 claves para amarte para ampliar información.
Así mismo, relacionarse con otras personas y ampliar tu circulo fomentará un desarrollo óptimo de tus habilidades sociales.
Por otro lado, es importante reajustar expectativas en cuanto a las relaciones con otras personas. Se valiente y amable contigo mismo, márcate objetivos pequeños y a corto plazo.
Estos son algunos cambios que podemos realizar para relacionarnos mejor con nosotros mismos y con los demás y, de esta manera, generar una forma saludable de amar. La dependencia emocional es superable si se entienden las herramientas necesarias. Consulta las terapias de Actua Psicología para parejas.
Si te sientes identificado y crees que podrías necesitar ayuda de un profesional, en Actúa Psicología contamos con profesionales que pueden ayudarte a resolver este conflicto y mejorar tu bienestar y calidad de vida. Recuerda: la 1ª consulta es gratuita.