¿Qué son los trastornos del sueño?
El sueño consiste en un proceso fisiológico en el que aparece una intensa actividad cerebral y una reducida reactividad ante los estímulos externos del ambiente.
Si para la población adulta es fuente de funciones importantes, en el caso de los niños aún cobra mayor relevancia si cabe, puesto que este estado de reposo absoluto les brinda las condiciones necesarias para la maduración física y psicológica.
La presencia de síntomas tales como la hiperactividad, la falta de concentración, un estado de irritabilidad o cambios bruscos de humor nos deben poner en alerta sobre la presencia de posibles dificultades en el sueño.
Detrás de este tipo de problemas encontramos distintos factores en función de la edad del menor:
- Determinadas reacciones de los padres ante el comportamiento del niño, las rutinas asociadas al dormir o la involucración excesiva en el sueño del menor, pueden estar explicando la aparición de trastornos del sueño en niños menores de dos años.
- En niños en edad escolar, encontramos que la falta de una rutina estable asociada al momento de irse a la cama, siestas prolongadas o el agotamiento físico o psicológico pueden explicar la aparición de problemas vinculados al sueño en esta etapa.
- Una importante reducción de las horas dedicadas al sueño y hábitos inadecuados suelen ser factores presentes en los problemas de sueño que ocurren durante la adolescencia.
Los trastornos del sueño más frecuentes en estas etapas son los siguientes: sonambulismo, terrores nocturnos, pesadillas, insomnio, bruxismo…
Los distintos trastornos del sueño también pueden aparecer como consecuencia de la existencia de un problema psicológico previo.
¿Cómo te ayudamos? Nuestro Tratamiento.
Una vez realizada la evaluación de problema y el análisis de los distintos factores de inicio y de mantenimiento elaboramos un plan de tratamiento específico para el niño o adolescente haciendo plenamente partícipes a los padres de todo el proceso.
El tratamiento psicológico, en general, va orientado al establecimiento de medidas de higiene del sueño, facilitando información adecuada a los padres sobre las pautas a seguir y poniendo en marcha las estrategias necesarias para el establecimiento y mantenimiento de dichos cambios, así como el manejo de las dificultades que puedan surgir.