trastornos del estado de animo

Depresión

¿Qué es la depresión?

La depresión es un trastorno del estado de ánimo que incide de forma negativa sobre la calidad de vida y bienestar de la persona y de su entorno.

Suele aparecer durante los primeros años de la adultez aunque puede afectar a niños y adolescentes.

Este bajo estado de ánimo mantenido en el tiempo además, genera lo que se conoce como “la trampa de la depresión”. Es decir, la persona al sentirse triste no tiene ganas de hacer cosas, al no hacer actividades esa tristeza suele ir en aumento, y al seguir estando desanimada seguirá sin ganas de hacer cosas… y este proceso va repitiéndose como un círculo vicioso hasta que no pongamos en marcha alguna estrategia diferente para cambiarlo.

Por tanto la depresión es un trastorno emocional mantenido en el tiempo que se manifiesta a través de diferentes síntomas que afectan al desempeño de la persona en distintos niveles.

  • Cognitivo: dificultades para concentrarse, problemas de memoria, lentitud de pensamiento, dificultad para tomar decisiones e ideas suicidas.
  • Emocional: tristeza, ansiedad, sensación de vacío, pesimismo, desesperanza, sentimientos de culpa, inutilidad e impotencia.
  • Conductual: irritabilidad, inquietud y agitación o movimientos lentos, llanto, aumento de la latencia de respuesta, volumen de voz bajo o incluso mutismo.
  • Fisiológico: fatiga, falta de energía, insomnio, dolor de cabeza, cambios en el apetito, malestar persistente, pérdida del deseo sexual.

Aunque la tristeza suele ser uno de los síntomas más característicos, cuando la depresión es más grave o está más avanzada, la persona puede llegar a sentirse desconectada de sus sentimientos.

Puede ser habitual que aparezca la astenia y la persona deprimida suele referir que incluso las tareas más sencillas, como levantarse de la cama, lavarse y vestirse, pueden ser muy agotadoras y siente que necesita hacer un gran esfuerzo para llevarlas a cabo. También puede ir perdiendo el interés por las cosas que antes disfrutaba y abandona sus aficiones o actividades que antes eran agradables pero que ahora no encuentra placer en ellas.

Es importante aclarar que cuando los síntomas de la depresión son leves pero se extienden en el tiempo durante al menos dos años, no estaríamos hablando de depresión sino de Distimia.

La depresión es el resultado de una combinación de factores genéticos, bioquímicos y psicológicos.

  • Factores genéticos: De hecho, el trastorno depresivo mayor puede ser más frecuente en las personas que han tenido un padre o una madre que haya padecido de depresión. Además determinadas características de personalidad también aumentan la predisposición a sufrir un cuadro depresivo.
  • Factores bioquímicos: Se ha podido apreciar que algunas zonas del cerebro de la persona deprimida funcionan de manera diferente, sobre todo las áreas responsables de la regulación del estado de ánimo y el pensamiento. De hecho, se conoce que los niveles de algunos neurotransmisores son especialmente bajos en las personas que sufren depresión. La depresión parece también estar relacionada con la inflamación de bajo grado en el organismo.
  • Factores psicológicos: Algunas circunstancias en la vida de la persona, como la muerte de un ser querido o un cambio radical en su vida, son el factor que desencadena la depresión. Hay veces en que puede aparecer sin que exista una crisis que haya actuado como desencadenante.

La tendencia al perfeccionismo, una sensibilidad extrema, una baja autoestima y las dificultades para el manejo de las críticas también aumentan las probabilidades de que la persona desarrolle una depresión. De hecho parece ser el resultado, en gran parte, por una lado, de la pérdida de refuerzo positivo y, por otra, de las creencias o pensamientos erróneos y distorsionados que le hacen verse a sí mismo, al mundo y al futuro desde un prisma negativo..

 

¿Cómo te ayudamos? Nuestro Tratamiento.

 Desde Actúa Psicológica trabajamos en un método de trabajo específico en el tratamiento de la depresión. Una vez realizada la evaluación detallada de la situación, y analizada la biografía de la persona, los factores de inicio y mantenimiento del problema y las variables tanto externas como internas que inciden en él, devolvemos esta información al paciente y planteamos un plan de tratamiento para el abordaje de la sintomatología y la recuperación del bienestar a todos los niveles de la persona.

Desde Actúa, nuestros objetivos principales en el tratamiento son:

  • Informar y explicar a la persona sus factores de origen y mantenimiento del problema.
  • Adoptar hábitos de vida saludables para la persona ,como ejercicio, sueño, alimentación ya que pueden activar la producción de distintos neurotransmisores que estimulan la relajación y la sensación de bienestar.
  • Activar el funcionamiento diario básico de la persona y de sus actividades familiares, de estudios, laborales, sociales.
  • Fomentar actividades que antes eran agradables para la persona y volver a potenciar sus relaciones sociales, con el objetivo de salir de la llamada trampa de la depresión (que hemos comentado anteriormente)
  • Trabajar en las creencias y pensamientos negativos y erróneos y sustituirlos por otros más adaptativos que hagan tener una visión de la persona del mundo y del futuro más realista.
  • Aprender técnicas de gestión y regulación emocional para tener más recursos.
  • Recuperar la autoconfianza y aumentar la autoestima.
  • Potenciar técnicas de relajación y mindfulness.

Desde Actúa, nuestro enfoque para el abordaje de este problema es principalmente desde una orientación cognitivo conductual, integrando también las orientaciónes sistémico y humanista lo cuál nos permite trabajar en distintas técnicas validadas científicamente que demuestran una alta eficacia y mantenimiento positivo en la superación de la depresión y en que la persona recupere una calidad de vida positiva.